Como muchos de vosotros ya sabéis, para garantizar un estado de salud oral óptimo es fundamental llevar a cabo rutinas diarias de higiene bucodental, ya que de lo contrario se fomenta el origen de caries y sarro en la boca.
El instrumento más común, a la hora de realizar la mencionada higiene bucodental, es el cepillo dental. No obstante, también existen otros instrumentos muy útiles, eficaces y necesarios para lograr una limpieza más exhaustiva. Uno de dichos instrumentos es… ¡El hilo dental!
¿Qué es el hilo dental?
Este hilo dental, también conocido como seda dental, es un uno de elementos más conocidos para la higiene oral. Mediante su uso podemos eliminar los restos de comida acumulada entre los dientes, evitando así la formación de la placa bacteriana o el sarro.
Son múltiples las ventajas de utilizarlo, ya que evita el mal aliento u olor bucal desagradable, evita la formación de caries y el riesgo de enfermedades dentales (provocadas generalmente por bacterias), así como manchas en los dientes. Además, suele reducir el sangrado de las encías y su inflamación, mejorando la salud de éstas.
Su uso diario es muy importante para tener las encías y los dientes más sanos, ya que con el hilo llegamos a zonas de los dientes que generalmente con el cepillo no podemos alcanzar, por lo que se debe complementar el uso de ambos, cepillo e hilo.
Tipos de hilo
Según su superficie existen varios tipos, como hilo con o sin cera, cinta dental (con mayor superficie) o superfloos.
Superfloss
En concreto, el superfloss es muy útil en aquellos casos en los que el hilo no se puede usar, como en pacientes con prótesis fijas, coronas, puentes o aparatos de ortodoncia (por ejemplo retenedores o brackets) ya que gracias a que este tipo de seda, que tiene un extremo rígido como una aguja y viene en partes individuales, logramos insertarlo por debajo de estos elementos y eliminar los restos entre diente y diente.
Hilo de cera
En cuanto al hilo con cera mejora la eficacia de la limpieza y es menos dañino que el superfloss, en cambio, arrastra menos placa, por lo que suele estar indicada en pacientes con menos destreza o que tienen obturaciones interproximales.
¿Cómo se debe utilizar el hilo dental?
Se deben coger aproximadamente 45 centímetros de hilo. Se anudan sus extremos en los dedos índices de la mano derecha e izquierda con un poco de forma, para que nos permita mantener tenso el hilo, tras esto deslizamos con ayuda de los pulgares a dos o tres centímetros de los extremos presionando con cuidado entre los dientes para no hacer daño a nuestra encía, y una vez en la parte más cercana a esta vamos moviéndola de abajo a arriba sobre la superficie de nuestros dientes, eliminando así la placa acumulada.
¿Cuándo debemos usar hilo y cuándo cepillos interdentales?
Tanto la seda como los cepillos interdentales sirven para lo mismo, pero según el espacio que exista entre nuestros dientes será mejor el uso de una cosa u otra. Por ejemplo, si dicho espacio es muy grande y metemos hilo dental, éste entra y sale con mucha facilidad pero no arrastra los restos de comida, ya que no llega a la superficie de los dientes, por lo que deberíamos usar un cepillo interdental, que tiene mayor superficie.
La mayoría de pacientes desconocen las múltiples ventajas que aporta el uso del hilo y otros elementos de limpieza en la higiene oral, por lo que recomendamos que acudas a tu limpieza anual para que te ayudemos a mejorarla.
En todas nuestras limpiezas dentales en Gross Dentistas dedicamos tiempo a enseñarte a mejorar tu higiene dental explicándote este tipo de técnicas de forma detallada y además te ayudamos a elegir el mejor elemento de limpieza interdental para cada persona, por lo que ¡no dudes en llamarnos!
Especialista en implantología y técnica All-on-4. Amplia experiencia en la realización de implantes dentales y otros tratamientos dentales.